Simplemente, un cepillo de llantas con una cabeza de espuma recubierta de la más suave microfibra. ¿El resultado? El cepillo más suave que se puede adquirir. Ideal para llantas delicadas o que requieren el máximo cuidado. El cepillo tiene además un tamaño muy correcto que le permite llegar sin esfuerzo al interior de la garganta de la llanta (el punto flaco del Gerbil). Al ser de microfibra es casi indestructible independientemente del limpiallantas que usemos. Una nueva incorporación a la vanguardia del detailing. 30 cm de largo x 8 cm de ancho
Más información